Hoteles
La comodidad del hotel depende en gran medida de un clima interior confortable. Puesto que los hoteles se ubican con frecuencia en entornos altamente corrosivos, los sistemas de aire acondicionado deben estar bien protegidos y mantenidos para satisfacer las exigencias. El impacto del aire salado y de los gases de la ciudad en el intercambiador de calor de un aire acondicionado puede provocar la corrosión. Un intercambiador de calor corroído aumentará el índice de fallos del aire acondicionado y provocará un incremento significativo de los costes energéticos. Los hoteles no pueden permitirse que sus sistemas de aire acondicionado fallen.
Hoteles de todos los entornos se benefician del efecto de ahorro energético significativo del tratamiento de Blygold.